Uno de los principales “inconvenientes” de gran cantidades de móviles son los materiales que algunos de sus componentes internos pueden llegar a requerir. El galio, el indio y el arsénico pueden llegar a ser ejemplos de algunos elementos requeridos para ciertos componentes. Estos elementos no son fáciles de conseguir y además tampoco son baratos, por lo tanto sería estupendo si se pudieran crear los componentes a partir de materiales mucho más comunes y baratos, como es el caso del carbono.
Los investigadores están avanzado a pasos lentos pero seguros en esta área con el fin de simplificar los requerimientos de nuestra tecnología. La idea final es poder hacer pleno uso de nanotubos de carbono en los teléfonos móviles y otros dispositivos. La utilidad de estos cilindros es que pueden ser usados tanto para conducir electricidad como también para almacenarla.
En la Universidad Técnica de Dinamarca, el investigador Jakob Wagner y varios de sus colegas han logrado encontrar una forma de crear nanotubos de carbono para que puedan ser utilizados como semiconductores, componentes claves en cualquier dispositivo electrónico moderno, ya sea un smartphone o una notebook.
Wagner dice que los nanotubos no podrán ser aplicados de forma inmediata, pero supone que si se sigue investigando se podrían implementar dentro de unos 10 años aproximadamente.