LG ha decidido que es hora de mantener el agua limpia y ha desarrollado una solución para el problema de las aguas residuales mediante un proceso que lleva a cabo el Green Membrane Bioreactor (G-MBR).
LG anunció su interés en el tema hace algunos meses y enfocó su mejor tecnología en ello. El G-MBR requiere un 34% menos de espacio que los reactores convencionales a sus delgados y planos módulos con membrana de microfiltración. Además estas membranas impiden la entrada de residuos gracias a su función de detección de desechos.
No hay nada de novedoso en esto, quizá el que sea de LG. Nada más.