Un grupo de investigadores de la Universidad Rice han dado el primer paso de un proceso que terminará dejando al grafeno como el segundo material más resistente conocido por el hombre. En anteriores ocasiones ya les hemos contado muchas veces sobre las diversas propiedades del grafeno, y una de ellas es que es extremadamente resistente. De hecho, hasta ahora era el material más resistente de todos, pero un “nuevo” competidor le ha quitado ese puesto.
Y ponemos la palabra nuevo entre comillas, ya que el carbino es un material que en realidad es conocido hace varias décadas. Las investigaciones sobre él están comenzando a arrojar un poco más de luz en estos días, cuando se descubrió que gracias a sus poderosos enlaces entre los átomos de carbono, este pequeño tiene el doble de resistencia que el grafeno y cuenta también con un cierto grado de flexibilidad.
Los expertos en nanotecnología dicen que el carbino podría llegar a ser utilizado para crear una nueva generación de implantes sumamente pequeños que serían además compatibles con nuestro cuerpo.
A pesar de ser asombroso, el carbino tiene un par de desventajas: es muy raro y también es bastante inestable. Crearlo artificialmente en un laboratorio resulta un proceso peligroso, puesto que puede llegar a causar una explosión considerable. Y si lo buscamos en la naturaleza, lo ideal es recurrir directamente a los meteoritos que llegan a la superficie del planeta.
Todavía no sabemos exactamente qué le depara el futuro al carbino. Primero que nada, será necesario realizar una mayor cantidad de investigaciones.