La colonoscopia debe de ser uno de los procedimientos médicos menos placenteros que existen. Debido a esto, siempre se han buscado alternativas para que no sea necesario introducir una cámara por ese lugar del cuerpo donde no llega la luz del sol. Corría enero de 2012 cuando surgieron los primeros reportes sobre una pequeña cámara con forma de píldora, la cual podía ser tragada por el paciente para luego hacer varios videos de su interior, más específicamente del colon y del recto. Originalmente esta idea no fue aprobada por las autoridades correspondientes, pero ahora el panorama ha cambiado.
La nueva minicámara PillCam Colon de Given Imaging ha recibido todas las aprobaciones necesarias para ser utilizada en el ámbito médico y su funcionamiento es relativamente sencillo.
Cada unidad de la PillCam Colon cuesta unos $500 dólares aproximadamente, dispone de una cámara en cada extremo y tiene una luz LED para iluminar nuestro interior. El procedimiento es simple: ponemos la cámara-píldora en nuestra boca, la tragamos (sin masticar obviamente) y unas 8 horas más tarde grabará videos de nuestro sistema digestivo, luego de lo cual la expulsaremos del cuerpo por la puerta de atrás.
Los avances de la tecnología son estupendos y al ser aplicados a la medicina abren la puerta a muchas posibilidades y procedimientos que hace pocos años no podían llevarse a cabo.