Las tiendas de aplicaciones como iTunes de Apple, Google Play, Windows Phone Store, BlackBerry World y todas las demás se supone que deben ser espacios seguros para los usuarios y las apps. Las aplicaciones que están disponibles para descargas en estas tiendas siguen un cierto conjunto de reglas y por lo general son verficadas y aprobadas antes de ser lanzadas para el público. Es importante que las apps que los desarrolladores suban no contengan ninguna clase de malware ni otro software no deseado, cosa que puede ocurrir en algunas tiendas de terceros.
De acuerdo con algunos reportes revelados recientemente, parece que agencias de espionaje de Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido habían estado trabajando en conjunto para desarrollar nuevos métodos para obtener información de la gente. Una de las muchas ideas era incorporar spyware (software espía) en las aplicaciones de la tienda Play de Google.
Esta situación se ha dado a conocer gracias a reportes filtrados por el conocido informante y ex-agente Snowden, donde se indica que Android Market (nombre con el cual se reconocía a Google Play hace algunos años) era la vía que planeaban usar las agencias para infectar millones de dispositivos y recoger datos. También hay detalles sobre operaciones similares que se iban a llevar a cabo a través de la tienda de apps de Samsung, aunque no está claro si al día de hoy todos estos planes se mantienen en pie, de hecho ni siquiera se sabe si llegaron a ser implementados.
Los informes también revelan que las agencias lograron encontrar una falla de seguridad en UC Browser, software creado por una compañía de China. Este navegador es bastante usado en dicho país y al parecer las agencias se las arreglaron para usarlo para sus propios fines, que por supuesto es recoger información de individuos y sus intereses. Obviamente las agencias ni siquiera informaron sobre la falla de seguridad que habían descubierto, aunque la misma fue corregida un tiempo más tarde luego de haber sido encontrada por terceros.
Representantes de algunas de las agencias se han negado a realizar comentarios, mientras que en otros casos se ha indicado que todo lo que se hizo fue dentro de los marcos legales y por razones de seguridad nacional.