Si hay algo que Apple ha intentado hacer durante años pero hasta el momento no lo ha logrado, eso es romper su relación con Samsung. La compañía ha dependido muchas veces de Samsung para que le suministre los chips que usa en varios modelos del iPhone, y parece que necesitará de la surcoreana una vez más. Se ha dado a conocer que la próxima generación de iPhones nuevamente hará uso de chips creados por el mayor rival de Apple.
De acuerdo con los reportes, Samsung se está preparando para producir el chip Apple A9 que será usado en el iPhone 6S y probablemente también en el iPhone 6S Plus, los cuales llegarían al mercado en octubre. Recordemos que el año pasado Apple optó por dejar la producción de chips en manos de la firma TSMC (Taiwan Semiconductor Manufacturing Co.). La rivalidad existente entre la manzana y la surcoreana fue lo que le llevó a alejarse, pero ahora vuelve a recurrir a Samsung.
Los chips que Samsung produce son considerados como los mejores del mercado junto a los de Qualcomm, y entre ambas compañías dominan fácilmente el sector de gama alta de los smartphones Android en lo que a chips respecta. Dada la experiencia, capacidad de producción y tecnología con la cual Samsung cuenta, de seguro a nadie le llama la atención el hecho de que Apple vuelva a acudir a ellos, a pesar de que ambas partes no se llevan muy bien y siempre están metidas en algún lío o disputa de distinta índole.
Por supuesto nada de esto ha sido confirmado oficialmente por Apple y Samsung tampoco ha abierto la boca. El momento de comenzar la producción de los chips sin lugar es certero, ya que después de todo los smartphones estarán llegando al mercado en cuestión de unos 6 meses.