La razón por la cual las ventas del Galaxy S5 no fueron tan buenas como las del Galaxy S4 es sencilla: falta de innovación. Con el S5 lo que Samsung hizo es darle al público un smartphone ligeramente mejor, pero que seguía usando materiales como el plástico y ni siquiera ofrecía una pantalla con resolución superior a la Full HD. La historia de los nuevos modelos presentados recientemente en Barcelona es muy distinta. Tanto el Galaxy S6 como el S6 Edge han recibido muy buenas críticas, y son muchos quienes han destacado los nuevos diseños, materiales y la estupenda pantalla de estos dispositivos. Lo cierto es que la surcoreana le tiene mucha fe a sus nuevas creaciones, tanto que uno de los ejecutivos de la compañía, Andy Tu, ha dicho que esperan que las ventas superen a todos los predecesores.
El récord de ventas que Samsung busca romper en realidad es el del Galaxy S4, que es su smartphone más vendido hasta la fecha. El S5, como ya les decíamos, no logró ser tan exitoso como la compañía esperaba y de hecho acabó comprometiendo el liderazgo del gigante en el sector de gama alta, aunque hasta el día de hoy la surcoreana conserva su corona.
Tu ha indicado que han decidido responder a las críticas que recibió el Galaxy S5 haciendo grandes cambios en el nuevo modelo, o mejor dicho, en los nuevos modelos. El ejecutivo espera que los nuevos materiales, diseños y especificaciones generen una mayor demanda para los productos de la familia Galaxy.
Recordemos que el próximo 10 de abril el Samsung Galaxy S6 (y también el S6 Edge) estará disponible en 20 países alrededor del globo. Quienes planean comprarlo sin contrato deben prepararse para vaciar la alcancía, ya que se manejan precios de más de $800 dólares.
Eso espero porque para mí el S5 no fue un gran modelo