Una web rápida es el pilar fundamental de la experiencia del usuario, una característica obligatoria para ser parte de los primeros resultados en buscadores. Pero existen muchos factores para tener en cuenta y la falta o falla de cualquiera de ellos arruinará la velocidad de tu sitio. Exploraremos estas características en el presente artículo.
Antes que nada, debemos entender brevemente qué componentes hacen posible la existencia y disponibilidad de un sitio web, lo cuales son en términos generales: el servidor de alojamiento web o hosting funcional, el paquete de archivos que compone al sitio web en sí y el dominio web o dirección por el cual se accederá de forma pública.
El paquete de archivos
Se denomina así al conjunto de archivos que conforman el sitio web completo, ya sea archivos de páginas web o de recursos multimedia, scripts de programación y maquetado y códigos de estilo. Básicamente le dicen al navegador cómo organizar la información y presentársela al usuario.
La forma de agilizar una web en esta área tiene que ver con utilizar de forma eficiente y limitada los recursos gráficos y elementos con mayor peso en datos.
Algunas prácticas son:
- Evitar sobre dimensionar imágenes:
Las imágenes que van a mostrarse en cierto tamaño específico no necesitan ser de un tamaño mayor, puesto que ocupan mayor capacidad en disco y demoran más en ser transmitidos por internet.
- No usar SVG muy complejos:
Estos recursos gráficos resultan muy interesantes porque ocupan muy poco espacio en disco, no se pixelan ni pierden calidad con el zoom u otro tipo de escalado. El problema es que deben ser interpretados por el navegador y demoran cierto tiempo si los gráficos son muy complejos.
- Evitar el uso de recursos multimedia innecesarios:
En varias ocasiones nos encontramos con sitios web que adicionan sonidos o música de fondo, a veces de forma contraproducente y molesta para los internautas. Evitar esto no solo aligerará tu sitio web, sino que lo hará más profesional. Si la experiencia del usuario requiere de estos recursos puedes utilizarlos, pero siempre tratando de mantenerlos al mínimo.
Puedes valerte de un sistema de métrica web para calificar diferentes aspectos del rendimiento de tu sitio, y de esta forma, saber qué puntos mejorar. Tendrás datos útiles como tiempo de carga y en algunos casos recomendaciones puntuales que lograr.
El servidor
Se denomina así al dispositivo (en la práctica un conjunto de ordenadores) que alojarán los archivos del sitio web y lo sirven a cada cliente que lo solicita (internautas) El servidor tiene un rol crucial en la velocidad puesto que las prestaciones son las determinadas por el plan contratado.
Algunas prácticas relacionadas con este componente son:
- Elegir un proveedor de calidad:
Esto parece trivial, pero la razón fundamental tiene que ver con las buenas prácticas y la política de rechazo a las prácticas abusivas por parte de ciertos clientes. Recuerda que este tipo de servicio es compartido, y lo que hacen los demás clientes influye en el rendimiento del servidor web que usan los otros clientes. Es responsabilidad del proveedor limitar y penalizar las malas prácticas.
- Leer la letra chica del contrato:
Muchos proveedores usan términos como “ilimitado” para referirse a parámetros como espacio en disco y ancho de banda, trata siempre de entender a qué se refiere con ilimitado puesto que esto es imposible de realizar de forma técnica y ambos son parámetros que influyen en la velocidad y disponibilidad de la web.
- Seguir las recomendaciones del proveedor:
Algunas tecnologías pueden no ser completamente compatibles o causar problemas en los servidores de tu proveedor. Aunque es poco común, asegúrate de estar siguiendo los lineamientos del proveedor para evitar inconvenientes en tu sitio web.
El nombre de dominio web
Con esto nos referimos al nombre particular con el que se accede a un sitio a través del navegador. Por ejemplo, se escribe google.com para acceder al buscador favorito. Este componente está relacionado con la velocidad de acceso a un sitio web, pero depende de cada proveedor de internet y otros sistemas como el DNS, por lo que no hay recomendaciones puntuales que puedas llevar a cabo con este elemento. Solo ten en cuenta que un nombre de dominio corto y memorable es lo óptimo y recomendable para facilitar el acceso a tu web.
Conclusión
No debes conformarte con tener un sitio web funcionando, sino que debes estar pendiente que sea la mejor versión. La velocidad es el parámetro más importante no solo para los buscadores sino para los usuarios que, acostumbrados a la inmediatez de las tecnologías actuales, dejarán tu sitio web antes de visualizarlo si este demora demasiado en cargar.
Además, existe un tipo de dispositivo muy utilizado que puede disponer de conexiones a internet mucho más lentas. Por supuesto que nos referimos a los dispositivos móviles, los cuales se están utilizando exhaustivamente para hacer búsquedas, reservaciones y todo tipo de navegación en la red mundial. Agilizar una web, les ayudará a estos usuarios y por consiguiente, te posicionará mejor.